IH Esencias Minerales: Rhodonite

Foto: Katya Adaui.

Rhodonite transforma y estabiliza nuestras emociones. Calma y trae órden a nuestros sentimientos cuando se encuentran dispersos desbalanceados o no enraizados. A través de su elevación firme, Rhodonite gradualmente transforma nuestros cimientos emocionales, haciéndolos más sólidos, saludables y seguros. Al mismo tiempo, eleva nuestro cuerpo físico al aumentar lenta y gentilmente la calidad de su energía. Rhodonite aumenta nuestra perspectiva y profundiza nuestro entendimiento sobre nuestras emociones, ayudándonos a ser más balanceados, maduros y fuertes.

¿Cuándo utilizar la IH Esencia Rhodonite?

Siempre que uno o más de los siguientes aplique:

1. Si estamos experimentando:

a. Inestabilidad emocional o no sentirse enraizado.

b. Duelo.

c. Ansiedad o depresión ligera.

d. Irritabilidad.

e. Emociones/reacciones a flor de piel.

2. Si deseamos:

a. Construir una base más sólida y segura emocionalmente.

b. Experimentar estabilidad emocional durante tiempos difíciles.

c. Promover un estado de mayor calma emocional y paz.

d. Entender mejor nuestras emociones.

e. Encontrar en la vida más gracia y balance.

Beneficios

Cuando nuestra base emocional mejora, nuestro cuerpo y emociones pueden encontrar armonía entre ellos y así responder a las situaciones que la vida propone, de forma apropiada y saludable.

Para crear una base emocional sólida, Rhodonite primero establece una nueva conexión entre nuestros cuerpo físico y emocional. Est aumenta la calidad vibratoria de nuestro cuerpo físico y provee a nuestro cuerpo emocional de un pie seguro con el cual realizar cambios positivos. Entonces Rodocrosite ayuda a organizar y cimentar nuestras emociones, de manera que se vuelvan más ordenadas y balanceadas.

Rhodonite forma una conexión entre el cuerpo y las emociones de dos maneras. Primero, construye una conexión energética entre nuestra espina dorsal y su contraparte en el cuerpo emocional. Esto despierta las células de nuestra espina dorsal y permite la entrada de una mayor cantidad de oxígeno en el sacro, resultando en un fenómeno sacral llamado respiración. Esta respiración vitaliza los órganos cercanos al sacro, nutre y sana los órganos reproductiores y alienta mayor sincronicidad y cooperación entre el cuerpo y las emociones. Segundo, Rhodonite construye una matriz energética entre nuestras cuerpos físico y emocional. Esta matriz soporta la construcción de una conexión más fuerte, sana y duradera entre ambos.

La construcción de esta matriz es también el primer paso en trasnformar nuestra base emocional. La matriz forma la base de una nueva, más sólida base donde nuestras emociones pueden volverse más organizadas y enraizadas. Cuando un albañil coloca una pared de ladrillos, coloca maderos en los bordes para crear la forma del lugar donde quiere colocar los ladrillos. Estos maderos son como la matríz energética de Rhodonite y los ladrillos son como nuestras emociones. Rhodonite construye su matríz con gran detalle, creando un molde para cada emoción individual, o ladrillo.

Cada emoción que experimentamos potencialente sirve como ladrillo en nuestra base emocional. Cada una tiene un lugar óptimo en nuestra base, donde contribuye principalmente a la estabilidad de la base. Una base emocionalmente sólida consiste mayormente en emociones organizadas correctamente en compartimentos.

Sin embargo, cuando nuestra fundación se encuentra colocada de manera inapropiada, nuestras emociones tienden a flotar alrededor como globos sin lugar dónde aterrizar, lo cual resulta en desbalances emocionales. Estas emociones desarraigadas vuelan, a veces salvajemente, en las corrientes energéticas de nuestro cuerpo emocional. Estas emociones en forma de globo se encuentran ansiosas por ser expresadas. Es así como las personas cuyas bases emocionales no se encuentran colocadas apropiadamente y que tienen muchas emociones desarraigadas tienden a ser emocionalmente reactivas. Frecuentemente montan en cólera, celos o impaciencia; pueden también ser hipersensibles o llorar con facilidad.

Rhodonite reconstruye nuestra base emocional en una manera que permite a nuestras emociones encontrar sus propios lugares en nuestro cuerpo emocional. La energía de la Rodonita entra a nuestra base emocional, donde disuelve cemento viejo, suelta y libera los ladrillos que se encuentran incorrectamente colocados. Luego, mientras la energía de la Rodonita construye la matríz energética que será nuestra nueva base, comienza a dar lastre a nuestras emociones-globo. Cuando nuestra nueva matriz se encuentra completa, Rhodonite alienta a las emociones-globo que se encuentran desorganizadas y desarraigadas, a que se sitúen en los lugares correspondientes en la nueva base y contribuyan con la estabilidad.

Los cambios requeridos para reacomodar y transformar la base emocional, a pesar de ser saludable y deseada, puede algunas veces sentirse como disruptiva e incómoda. Rhodonite facilita este proceso aumentando su velocidad. Su energía también hace mucho del trabajo que sería realizado normalmente por nuestras emociones por sí solas, ahorrándonos así el sufrir la intensidad de la emoción que de otra forma sería necesaria.

Cuando las emociones se han colocado en sus lugares correspondientes, se vuelven parte de nuestra base y por tanto parte de nuestra fortaleza. Cuando nuestros sentimientos se encuentran mejor organizados, podemos entenderlos más fácilmente. Colocamos naturalmente nuevas experiencias emocionales en sus lugares óptimos y estamos menos propensos a sufrir crisis emocionales. Porque nuestras emociones no se encuentran volando fuera de nosotros y cubriendo situaciones, podemos también lidiar con situaciones de formas más maduras y objetivas. Damos la bienvenida a las experiencias inesperadas con mayor gracia y estabilidad. Nos volvemos más balanceados, maduros y fuertes.

Doliendo Saludablemente

Durante el proceso de duelo, las emociones se vuelven como globos de aire. Vuelan alrededor salvajemente, sobrecargando nuestra sensación de balance. Esto es natural. Cuando hemos perdido a un ser amado o hemos experimentado un cambio menor en nuestra vida, nuestra base emocional debe ajustarse, porque nuestras circunstancias esenciales de vida han cambiado. Los ladrillos que comprendían nuestra base emocional deben reacomodarse a sí mismos para calzar en nuestras nuevas circunstancias.

Los profesionales de la salúd hablan de diversas etapas en el proceso de duelo. Estas etapas son dolorosas pero necesarias en el proceso para disolver el cemento entre los ladrillos que componen la base emocional. También convierte temporalmente los ladrillos en globos, para que puedan ser reacomodados. Cuando el ciclo de duelo se ha completado, los globos regresan nuevamente al suelo, donde encuentran nuevos lugares en nuestra base emocional y se convierten en ladrillos. Esta es la razón por la que es necesario experimentar completamente todas las etapas del duelo ya que eso evita que arrastremos una base antigüa al futuro y nos permite forjar una nueva base dónde construir una nueva vida.

Rhodonite puede apoyar el proceso de duelo asegurando que experimentemos todas las etapas del proceso lo más rápido y comodamente posible. Aunque Rhodonite no puede aliviar el dolor completamente, puede acelerar la reconstrucción de nuestra base emocional. Su energía hace mucho del trabajo que normalmente sería realizado por nuestras emociones. Al usar Rhodonite, no tendrá que sufrir la misma intensidad del dolor que de otra manera habría requerido para reconstruir una nueva base.

Centrados en el Corazón

Rhodonite puede ser especialmente útil para personas que se encuentran trabajando conscientemente para volverse más centradas en el corazón. Para estas personas, una conexión físico-emocional es particularmente importante. Lamentablemente, muchas personas que están intentando volverse más centradas en el corazón, interpretan incorrectamente que eso significa ser centrados emocionalmente. Ellos creen, erradamente, que sus emociones son la fuente de la verdad, y basan sus decisiones principalmente en cómo se sienten. Pueden lograrse decisiones más sabias dando igual peso a la información del cuerpo, las emociones, la mente y la intuición. Rhodonite ayuda a las personas a manejar el cambio hacia una visión más balanceada de lo que significa una orientación hacia el corazón ayudándolos a colocar las emociones en una perspectiva adecuada.

*Guía de Tiempos

La reconstrucción emocional toma tiempo. También toma tiempo que la Rodonita construya una nueva matríz energética. Por lo tanto, es importante mantener un contacto contínuo con Rhodonite durante por lo menos las tres primeras semanas de uso y si es posible más tiempo. Para lograr esto, puede utilizarla durante el día y tenerla a un metro de su cuerpo mientras duerme. Esto probablemente permitirá suficiente tiempo para que la matríz sea reconstruida y para que algo de reacomodo emocional suceda.

Luego de utilizar Rhodonite durante este período inicial, entrará a la segunda fase, que es igual de importante. En esta fase, su cuerpo emocional se habrá vuelto lo suficientemente fuerte para comenzar a trabajar por su cuenta. Sabrá que ha entrado en esta fase cuando sienta que debe descansar del uso de Rhodonite. Entonces será momento de quitarse Rhodonite y usarla solo intermitentemente. Idealmente, durante este tiempo, debe mantener Rhodonite expuesta al aire cerca a su cama. Esto le permitirá mantener una conexión energética con el collar por la noche mientras se encuentra descansando. Dependiendo del tamaño de la casa, esta conexión probablemente permanezca intacta durante el día mientras la recorre y se liberará de ella cuando salga. No ponga a Rhodonite en contacto con plástico. Como sucede con todas las piedras, el plástico le quita el flujo de energía a Rhodonite y perturbaría su conexión con ella. Si comienza a sentirse emocionalmente endeble o inestable, o si siente que se está volviendo fácilmente irritable, es momento de utilizar nuevamente Rhodonite de manera constante. También puede querer utilizarla nuevamente simplemente por el soporte emocional que provee o cuando necesita ayuda para atravesar alguna situación temporal que le resulta emocionalmente difícil.

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